No me pregunten por qué, creo en mis supercherías. Es el año Noveno, el 9, el embarazo dulce, así de simple, por eso serán cambios benignos. Ya han comenzado. No obstante, muchos idiotas, cheos, nacos, cabrones, chivatos, plutócratas y dictadores van a rodar por el abismo; es decir, habrá escoba nueva para mejorar la higiene en los establos de la civilización.
Seguirá la náusea, la peste y todas esas alegorías y realidades del destino que narran los libros. Sísifo, penosamente, no se va a librar de su castigo, hasta que resucite el Fénix con maná para todos y hasta que las cenizas de los herejes se vuelvan golondrinas aquerenciadas y renovadoras. Nadie se libra de sus equivocaciones, pero las erratas serán parte de la armonía.
...1914, 1917, 1939, 1959, 1989, segundo milenio..., el ataque a las torres, la Guerra de Iraq, hasta el reciente asesinato en París, parecen solo fantasmas como los que veía Paul Nash y les temía, hasta que se acostumbró a ellos, a lo mejor nos sucede algo peor, pero no en el 2016. Del 2015 en adelante, el mundo sera una inmundicia con mals incurables, no lo dice un "avatar" futurista, lo dice el sentido común.
Aclaración: no creo en Nostradamus, pero sí en los sortilegios y en la historia. Ni me las quiero dar de pitonisa, es que me siento muy contento de que haya llegado un año bueno tras una larga y penosa sucesión de errores propios de nuestra especie en la fase media de la barbarie.
"El mundo no existe", dice el filósofo alemán de moda Markus Gabriel, tampoco la muerte existe, dicen por ahí los alucinados como yo, Añel, Markus el acelerado, primero lo dijo Mario Pons, también Confucio, no sé si Diógenes se atrevió a decirlo. La nada no existe, ni tú ni Yo, ni nosotros, me temo que suena a filosofía barata, pero tenemos derecho a decirlo, a alucinar y a crear libres, a ser imaginarios del mundo como lo queramos percibir, pues ni siquiera sabemos quién inventó la existencia y el amor, base de todo.
Cuando se está contento e inspirado se dicen tonterías, y a los poetas se les ocurren las mejores metáforas, la gente vuela sin alas, a causa del amor y de las ganas de vivir. El mundo no existe, pero la vida sí, así que hay que cuidarse de los manicomios ambulantes, de los charlatanes y de las nuevas utopías que nos quieren poner cadenas invisibles. Por suerte en el 2016 muchas cadenas se van al demonio. Todo esto lo digo, porque sí, porque creo que la poesía va a tomar el mando, antes del fin.
VIVA LA POESIA DE LA VIDA.
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